martes, 12 de enero de 2010

las islas malvinas



Los españoles ejercían el pacífico dominio de las islas desde que los ingleses se retiraran de la isla occidental, en 1774. El 14 de enero de 1811 la Junta española de guerra de Montevideo resolvio, por razones de defensa, abandonar Puerto Soledad. Durante nueve años no hubo autoridad en esos lugares hasta que el 27 de octubre de 1820 el comandante David Jewett del corsario argentino Heroína, cumpliendo órdenes del gobierno de Sarratea, entró en el abandonado Puerto Soledad y tomó posesión en nombre del gobierno de Buenos Aires. Ningún gobierno efectuó reclamos durante los siguientes años. En 1825 Parish firmaba en Buenos Aires el tratado de amistad y comercio anglo/argentino sin salvedad alguna sobre presuntos derechos ingleses en las islas
En 1831 se produjo el incidente en que intervino la corbeta norteamericana Lexington que, para impedir el cobro de derecho de pesca de las ballenas y lobos marinos por parte de las autoridades argentinas, entró al Puerto Soledad disimulada con pabellón francés y depuso al comandante delegado Brisbarne, secuestró a los colonos, clavó la artillería, quemó la pólvora, destruyó las pocas armas, saqueó las propiedades y destruyó las casas, internando a los colonos en Montevideo, en 1832.

En 1833 necesitando Gran Bretaña una base cerca del cabo de Hornos para la colonización de Australia y Tasmania, desempolvó antiguas pretensiones. Aprovechando la despoblación de Puerto Soledad, envió a la nave Clío ocupó Puerto Egmont en la isla occidental; luego su capitán John James Onslow, sin instrucciones, se presentó el 2 de enero de 1833 frente al Puerto Soledad y al día siguiente depuso a José María Pinedo - que había sido enviado por Rosas con la goleta Sarandí - interinamente a cargo de las islas.

Con posterioridad, la condición de deudora de Argentina debido al empréstito Baring, impidió la ruptura de relaciones ya que un deudor no podía romper relaciones con su acreedor - algo que sabía perfectamente el gabinete británico - quedando para la Confederación tan sólo la protesta lírica.

En 1840 fueron declaradas formalmente colonia británica y Gran Bretaña mantuvo en éllas ocupación efectiva desde entonces.


El 2 de abril de 1982 nuestro país ocupa las islas tratando de impedir a toda costa el derramamiento de sangre inglesa. En esas circunstancias cae herido de muerte la primera víctima argentina, el Capitán Giachino.

Luego Gran Bretaña, con el apoyo que los Estados Unidos le brindara con el espionaje satelital, el uso de su base marítima en la Isla Concepción, y el apoyo encubierto y no tanto de un par de países de la región, recuperó elarchipiélago, no sin antes que el submarino atómico Conqueror lanzara un innecesario ataque ya que se encontraba fuera de la zona de exclusión fijada por mismo gobierno inglés - por orden expresa de la "dama de hierro" Margaret Tatcher - al crucero General Belgrano, que se fué a las profundidades llevándose consigo a 323 marinos que integran la larga lista de 645 combatientes argentinos que cayeron en esas lejanas islas para defender la soberanía de nuestro país.

Por todos éllos, nos ponemos de pie para rendirles nuestro homenaje cantando

Marcha de Las Malvinas

¡Tras su manto de neblinas,

no las hemos de olvidar!

"¡Las Malvinas, argentinas!"

clama el viento y ruge el mar,

Ni de aquellos horizontes

nuestra enseña han de arrancar,

pués su blanco está en los montes

yen su azul se tiñe el mar.

Por ausente, por vencido

bajo extraño pabellón,

ningún suelo más querido

de la Patria en la extensión.

¿Quién nos habla aquí de olvido,

de renuncia, de perdón?

¡Ningún suelo más querido

de la Patria en la extensión!

¡Rompa el manto de neblinas,

como un sol, nuestro ideal;

"Las Malvinas, argentinas

en dominio ya inmortal"!

Y ante el sol de nuestro emblema

pura, nítida y triunfal,

brille, ¡Oh Patria!, en tu diadema

la perdida perla austral.

¡Para honor de nuestro emblema,

para orgullo nacional,

brille, ¡oh patria!, en tu diadema

la perdida perla austral!



Letra: Carlos Obligado

Música: José Tieri

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